martes, 5 de julio de 2016

Frágil por esta cara

Como la mía por no darla, cobarde, ausente y aterrada. Bonita, maravillosa, simple y a la vez  como esta canción. Tan grande como el vacío de los ausentes llenan las buenas almas los imperecederos.

Ale! Duele filosofar suerte que no vivo de ello que lo tendría crudo. Suerte tengo que a estas alturas nadie ha de leerme y puedo despacharme a gusto de mi insustancial e insoportable vida dentro de un inerte cuerpo que no responde a la menor reacción.

Ale! Agures!

3 comentarios:

Bea dijo...

No digas que nadie te lee, vecina! Te he echado de menos guapa. Besos.

Estela dijo...

Mi niña!

Pues creía que estaba solina! vaya por Dios, no me pondré tan profunda entonces... Un besazo corazón!

Marino Baler dijo...

Justo cuatro años de ausencia, ¿has estado de reformas vecina?